Desarrollo
Económico
Local
Subsecretaria General de las Naciones Unidas y Directora Ejecutiva de ONU-Habitat
Secretaria General de CGLU
Contexto
El impacto económico global causado por la crisis de la COVID-19 aún es impredecible. A diferencia de otras crisis económicas, nos encontramos en una situación única de parálisis, tanto en la oferta como en la demanda de bienes y servicios a escala global. Las herramientas tradicionales para impulsar la economía, ya sean fiscales o desarrollo de infraestructura, tienen poco impacto o no se pueden implementar debido a restricciones de salud.
Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), las preocupaciones surgen tanto desde una perspectiva a corto plazo (se estima que la COVID-19 empujará a 49 millones de personas a la pobreza extrema en 2020 ) como a largo plazo. Es probable que gran parte de las pérdidas económicas que se están produciendo debido a las restricciones sanitarias no se recuperen. Esto es particularmente cierto para sectores específicos, como el turismo o los viajes aéreos, pero también en términos de empleo. En los EE.UU., por ejemplo, alrededor de 40 millones de personas han perdido sus trabajos debido a la COVID-19 y se estima que alrededor del 42% de ellos resultarán en la pérdida permanente de empleos. Este es un desafío económico sin precedentes, que requerirá un cambio completo en nuestra estructura económica, más que herramientas fiscales y económicas conocidas.
130M
Las horas de trabajo globales han disminuido hasta ahora en un 4,5%, lo que equivale a aproximadamente 130 millones de empleos a tiempo completo.
305M
En el segundo trimestre de 2020, se espera que la caída sea del 10,5%, lo que equivale a 305 millones de puestos de trabajo a tiempo completo.
Retos
El impacto en el empleo y la actividad económica se manifiesta a nivel local. Si bien las políticas deben provenir de un nivel nacional, los gobiernos locales están a la vanguardia de la promoción de la actividad económica y la mitigación del impacto de la crisis. El principal desafío es encontrar un equilibrio entre la promoción de la actividad económica, garantizando los ingresos de la ciudadanía a corto y largo plazo, y la habilitación de un entorno seguro y saludable. Los gobiernos se enfrentan a una enorme presión, especialmente de sectores como la hostelería y el turismo. Otro desafío en términos de empleo es el del género, dado que el 42% de las mujeres en todo el mundo trabajan en el sector informal, lo que las hace más vulnerables a las recesiones económicas. Los gobiernos locales enfrentan el desafío de evitar que la brecha de género en los ingresos se agrande.
Necesidades
Los gobiernos locales deben afrontar este desafío económico teniendo en cuenta la fase de emergencia, la fase de recuperación temprana y la fase de “nueva normalidad” . En primer lugar, deben garantizar bienes y servicios básicos para quienes han perdido su empleo, estableciendo políticas de emergencia en materia de vivienda, seguridad alimentaria y fondos de emergencia para los sectores particularmente afectados. En segundo lugar, las ciudades deben coordinarse con múltiples actores para desarrollar medidas integradas que prioricen a los sectores más afectados y a las comunidades más vulnerables, como las mujeres, la infancia y las personas mayores. Finalmente, a medida que comenzamos a construir una “nueva normalidad”, las ciudades deben repensar los modelos de producción y consumo, estableciendo modelos más diversificados, sostenibles y resilientes. Esto es particularmente relevante para las economías basadas en el turismo o donde la mayoría de los ciudadanos trabajan en el sector informal.
Respuestas
Bogotá está ofreciendo transferencias de efectivo para las personas más vulnerables, así como la reactivación del sistema económico para garantizar el empleo
Gauteng está proporcionando acceso a la financiación a las pymes a través del Gauteng SME Partnership Fund
Sheffield está trabajando en el desarrollo de capacidades para fortalecer la resiliencia de la comunidad, proteger los aprendizajes y diseñar intervenciones para ayudar a los desempleados y desempleadas a aprender nuevas habilidades
Respuestas
Bogotá está ofreciendo transferencias de efectivo para las personas más vulnerables, así como la reactivación del sistema económico para garantizar el empleo
Gauteng está proporcionando acceso a la financiación a las pymes a través del Gauteng SME Partnership Fund
Sheffield está trabajando en el desarrollo de capacidades para fortalecer la resiliencia de la comunidad, proteger los aprendizajes y diseñar intervenciones para ayudar a los desempleados y desempleadas a aprender nuevas habilidades
Puntos Clave
- La pandemia y la crisis sanitaria resultante tendrán un impacto económico duradero. Las ciudades deben trabajar en planes de emergencia al tiempo que diseñan soluciones a largo plazo para apoyar el sustento de la ciudadanía, particularmente de aquellas poblaciones más vulnerables.
- Una crisis global de tal magnitud requiere un cambio verdaderamente transformador en el modelo económico a nivel local. Los planes de recuperación deben ser inclusivos y sostenibles, ya que los gobiernos deben concentrarse en construir comunidades más resilientes y adaptables.
- La relación urbano-rural está cambiando. Se valora el uso de la tierra rural para la agricultura en lugar de para la urbanización.
- Las economías que dependen en gran medida de un sector en particular deben buscar su diversificación. Desbloquear nuevas actividades económicas y programas de desarrollo de capacidades apoyará los esfuerzos locales para construir comunidades más resilientes.
- Las necesidades de la comunidad deben estar en el centro de los planes de recuperación. Con ese fin, el diálogo social y la participación cívica serán más importantes que nunca para construir políticas de recuperación efectivas e inclusivas.
Beyond
The Outbreak
La necesidad de recuperación económica crea una oportunidad para aplicar modelos y prácticas económicas alternativas, como la economía verde y circular, así como soluciones de innovación social y tecnológica para favorecer la estabilización de la cadena de suministro y la adaptación / reorientación y relocalización de la producción.
Las soluciones deben basarse en una economía más saludable y eficiente en el uso de recursos, así como en patrones de consumo y producción sostenibles y anclados en cadenas de valor locales. Igualmente deben incluir a jóvenes, mujeres e interlocutores sociales en el emprendimiento y la innovación social.
El impacto económico de la COVID-19 pone de relieve políticas económicas inclusivas que se han debatido durante mucho tiempo, incluida la idea de una Renta Básica Universal. Como medida de emergencia, muchos países están utilizando transferencias de efectivo para garantizar los medios de vida a quienes han perdido el ingreso y ayudar a mantener el motor económico en movimiento. Con los resultados de la pandemia aún poco claros, políticas como la RBU podrían ser una buena opción para los próximos años.
Reconstruyendo
Mejor
El Decálogo de CGLU
«La nueva normalidad debe abordar las desigualdades, protegiendo los bienes comunes y necesidades básicas como la vivienda, el agua y la energía; asegurándose de que estén libres de especulaciones para que todos los ciudadanos puedan tener igualdad de acceso a ellos.»
Recursos
Para obtener más información sobre el tema del desarrollo económico local y su impacto en las ciudades y regiones, consulte los recursos relacionados que se incluyen a continuación.
- Monitor de la OIT: COVID-19 y el mundo del trabajo. Tercera edición
- Mensajes clave sobre DEL de los gobiernos locales
- El turismo y su impacto en la vida cultural de las ciudades, reporte de la Comisión de Cultura de CGLU, 2019